El ex
Presidente Hipólito Mejía saludo los pronunciamientos y la postura del
Presidente del Consejo de la Empresa Privada (CONEP), durante su reciente
discurso ante la matrícula de las Cámara Americana de Comercio, en la cual el
líder empresarial realizó un amplio y profundo análisis de la situación
nacional.
A seguidas se
copia el texto íntegro de la carta de Hipólito Mejía al señor Rafael Blanco Canto
Presidente
del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP):
“Me
complace referirme a su reciente comparecencia ante la Cámara Americana de
Comercio, en la cual usted presentó un análisis realista de la situación
nacional actual, en cuanto a los principales asuntos que preocupan a la
ciudadanía.
“Su
voz, por ser la voz del empresariado dominicano, merece ser escuchada y
ponderada por todos nosotros, debido a que la actividad empresarial es el
motor, no sólo de nuestra economía, sino también del desarrollo general de
nuestro país.
“Quiero
destacar que sus planteamientos son coincidentes con los expresados por otros
importantes sectores empresariales, así como las iglesias, los partidos
políticos, las instituciones de la sociedad civil y la comunidad internacional.
“En
su presentación, usted se refiere a varios pilares sobre los cuales descansan
los principales males que afectan a la sociedad dominicana.
“La
situación que usted describe en su valiente discurso ha estado presente, de
manera destacada, en el debate que, en los últimos años, hemos tenido sobre los
principales temas que necesitan ser enfrentados para fortalecer la vida
democrática, la institucionalidad, la transparencia en el uso de los recursos
públicos y la imparcial e independiente administración de la justicia.
“Justamente,
varias veces me he referido públicamente a los temas abordados por usted en su
discurso. Mis reflexiones se resumen en lo siguiente:
“En
relación con la situación que vive el país, he dicho y reitero, que nuestra
sociedad hoy se caracteriza por una profunda desigualdad social, una marcada
debilidad institucional, la creciente inseguridad ciudadana, la impunidad, la
corrupción.
“Los
dominicanos padecemos los efectos de la falta de empleo de calidad, el
creciente endeudamiento, la alta informalidad de nuestra economía, el alza
descontrolada del precio de los combustibles, el aumento del precio de los
alimentos y de los medicamentos, y los altos niveles de déficits financieros,
entre otros males.
“Nosotros,
así como la mayoría del país, entendemos que los males antes mencionados,
constituyen una seria amenaza a la sostenibilidad económica y a la paz social.
“En
lo que respecta a las elecciones y los órganos que las administran, los pasados
comicios demostraron que nuestro país aún carece de garantías para celebrar
procesos electorales confiables y creíbles.
“Esa
deficiencia se debe, principalmente, a la cuestionable composición de la Junta
Central Electoral y del Tribunal Superior Electoral. Ambos organismos, lejos de
actuar para garantizar la transparencia y la equidad del proceso, se han
descalificado como árbitros imparciales, mediante sentencias, disposiciones y
manejos inapropiados.
“Por
tanto, es necesario que la Junta Central Electoral y el Tribunal Superior
Electoral, estén integrados por personas confiables que garanticen
transparencia e imparcialidad en los procesos.
“En
cuanto a la nueva Ley Electoral y a la Ley de Partidos, debemos convenir en la
necesidad de adecuar la actual Ley Electoral a la Constitución vigente. Además,
dicha Ley debe incorporar mayores controles en lo que se refiere a la
organización y el montaje de las elecciones, así como en el control del uso de
los fondos públicos y el establecimiento de un régimen de consecuencias para
los funcionarios que cometan irregularidades que distorsionen el proceso
electoral. Esto es especialmente relevante en lo relacionado con la
transparencia y la equidad.
“La
aprobación de una Ley de Partidos, por su parte, se hace imperativa. Esa Ley
contribuiría a la democracia interna de las organizaciones políticas, a la
regulación de las primarias, y a garantizar el derecho de los militantes de los
partidos a elegir y ser elegidos internamente. Esos procesos deben realizarse
con apego a lo que establecen los estatutos partidarios y la Constitución de la
República.
“En
lo que respecta al rol de la sociedad civil y la comunidad internacional,
reconocemos el aporte que estas instituciones han hecho y están llamadas a
hacer en las elecciones dominicanas. En efecto, las mismas son la garantía de
que las reformas que requiere el sistema electoral se lleven a cabo a tiempo, y
con la transparencia e independencia demandadas por la sociedad.
“A
esos fines, somos partícipes de que la Comunidad Internacional y la Sociedad
Civil sean actores claves, no sólo como observadores el día de las elecciones y
en el conteo de los votos, sino también durante todas las fases de la
organización y celebración de los comicios.
“Usted
ha sido claro y certero al plantear la responsabilidad de los partidos
políticos en el fortalecimiento de la democracia y de nuestras instituciones
fundamentales.
“Como
miembro del Partido Revolucionario Moderno, me comprometo ante el país en la
tarea de contribuir a que nuestra organización política adecue su vida interna
y su agenda de trabajo a las demandas de la sociedad dominicana, que usted con
mucha propiedad ha señalado.
“El
Consejo Nacional de la Empresa Privada, que usted preside, puede contar conmigo
como un aliado en los esfuerzos para fortalecer el sistema de partidos,
consolidar nuestra democracia y robustecer nuestras instituciones, como
requisito para mantener la paz social e impulsar el desarrollo integral y
sostenible de nuestro país”.
“Aprovecho
para reiterarle las muestras de mi amistad y consideración distinguidas.
Atentamente,
Hipólito
Mejía